P. Francisco Jordán, SDS
“Aunque se levanten olas contra ustedes, aunque surjan
persecuciones por todas partes venga lo que viniere, confíen en el Señor y sigan
hacia adelante.”
El
P. Francisco, fundador de los Salvatorianos, fue el hombre de la confianza en
la divina providencia, fue tal su confianza que quiso dejarla a sus hijos
espirituales como herencia, en su testamento espiritual, cuatro de ocho numerales
fueron dedicados a la confianza en Dios:
1.
Patrimonio perpetuo sea siempre para ustedes la confianza en la Divina
Providencia, que les nutra siempre cual próvida madre.
2.
Les dejo la Pobreza perpetua como tesoro precioso y margarita selecta,
de la cual Dios les pedirá cuenta en el día del juicio.
3.
En Dios solo pongan toda esperanza y confianza, quien como fuerte
guerrero combatirá por ustedes.
4.
Ay de ustedes si confían en hombres y riquezas.
Es
una gran enseñanza para todo creyente. Dios nunca desampara a los suyos. Ya
decía el Papa Benedicto XVI “No hay grito
humano que Dios no escuche”. No podemos desesperar o desesperanzarnos
porque no vemos que las cosas van como nosotros queremos, confiar en el Señor
quien nos dijo: “El Padre de ustedes, que
está en los cielos, dará cosas buenas a quien se las pida” (Mt. 7, 11).